El MUNCYT Coruña celebra la Semana de la Ciencia y la iniciativa “Ciencia y Sociedad” alrededor del 40 aniversario de ASEICA (Asociación Española de Investigación sobre el Cáncer), con la proyección del documental “El camino inverso”, sobre la trayectoria científica del bioquímico Mariano Barbacid. El documental, producido por la Fundación Hermanos Álvarez Quirós junto a K2000 – MediaPro, tiene una duración de 50 minutos y a través de un formato de entrevista, hace un recorrido por la carrera de Mariano Barbacid, cuyos descubrimientos han influido de forma trascendental en la forma de entender y tratar las enfermedades oncológicas.
Después de la proyección, se realizará un coloquio sobre el documental, que será moderado por Marisol Soengas, presidenta de la Asociación Española de Investigación sobre el Cáncer (ASEICA), y en el que participarán Mariano Barbacid, María Mayán, investigadora de ASEICA y la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular (SEBBM), Juan Arroyo Muñoz, gerente del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) y Raúl Romar, redactor de Ciencia del periódico La Voz de Galicia.
Mariano Barbacid obtuvo su Ph.D. en la Universidad Complutense de Madrid (1974) y se formó como becario postdoctoral en el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos (1974-78). En 1978, fundó su propio grupo de investigación para estudiar los eventos moleculares responsables del desarrollo de tumores humanos. En 1982 logró el aislamiento del primer oncogén humano y la identificación de la primera mutación asociada con el desarrollo del cáncer humano. Estos hallazgos, realizados también por otros dos grupos, han sido fundamentales para establecer las bases moleculares del cáncer humano. Tras destacados hallazgos (mutaciones de oncogenes RAS o aislamiento del oncogén TRK), en 1988, se incorporó a Bristol Myers-Squibb, donde se convirtió en vicepresidente de descubrimiento de fármacos oncológicos. En 1998 regresó a Madrid para crear y dirigir el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), cargo que dejó en 2011 para volver a identificar nuevas estrategias terapéuticas contra los tumores mutantes K-RAS. Su trabajo ha sido reconocido con varios premios nacionales e internacionales, entre ellos el Premio Steiner (Berna, 1988), el Premio Ipsen (París, 1994), el Premio Brupbaher de Investigación sobre el Cáncer (Zurich, 2005), la Medalla de Honor de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (Lyon, 2007) y la Medalla Burkitt (Dublín, 2017). En 2011, recibió una Cátedra del Fondo de Investigación AXA (París). Es uno de los pocos científicos europeos que ha recibido dos subvenciones avanzadas del Consejo Europeo de Investigación (2009 y 2015) desde su creación en 2008. En 2022 le fue otorgado el Premio Nacional de Investigación Santiago Ramón y Cajal en España.
